la mayor parte de las personas, le tienen un ferviente miedo a morir, pero si hablamos de las historias del Universo, a lo que más le tienen miedo es al fin de éste por una fuerza celestial. Pero si nos atemoriza el hecho de saber, que en algun momento de la vida, el lugar en donde vivimos puede dejar de existir ¿Por qué simplemente no cuidamos lo que queda de él? Pues podríamos ser nosotros los causantes de tal agravio.
Con mayor frecuencia se ve como la furia de la naturaleza destruye plobaciones, quita vidas humanas y acaba con los bienes materiales que encuentra en su camino. Sin embargo, no nos vemos motivados al cambio; sigue la tala indiscriminada de bosques, que no son solo los pulmones del mundo, sino que tambien limitan los vientos y no permiten que las corrientes de aire se unan para formar fuertes tornados. Es por esto, que en paises como EE.UU. los huracanes son tan frecuentes y destructivos, pues al estar deforestados los bosques, los vientos cogen velocidad y fuerza sin igual.
Además el uso de aerosoles y químicos gaseosos que perjudican la capa de ozono, hacen que el calentamiento global afecte los polos y derrita una gran cantidad de hielo. A su vez el agua de los mares aumenta su nivel, produciendo junto con el anterior problema, tsunamis y haciendo que en un futuro cercano, desaparezcan algunas islas.
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